La Fundación para la Promoción del Deporte Ecuestre ha colaborado con la Fundación Carriegos de León subvencionando dos becas para sesiones de equinoterapia. El programa, llevado a cabo entre los meses de octubre y diciembre, hizo posible que dos pacientes con pocos recursos pudieran continuar con sus sesiones y no vieran frenados sus progresos.

Una de las beneficiarias es una joven de 28 años con esquizofrenia a la que se le aplicó un Programa de Habilidades Deportivas. Se trata de desarrollar el área psicomotriz, cognitiva y socio-afectiva a través del aprendizaje de nuevas habilidades que permiten al alumno llevar el mando y control del caballo.

La segunda beca benefició a un niño de 6 años con Síndrome de Angelman. En su caso, el programa aplicado fue de Hipoterapia Pasiva, que consiste en una intervención fisioterapéutica y psicomotriz con base neurofisiológica, que aprovecha el paso del caballo, el calor y el movimiento tridimensional como herramienta rehabilitadora mientras el paciente no ejerce ningún tipo de mando sobre el caballo.